La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), se refirió a la noticia que circuló en las últimas horas a nivel nacional sobre el desbordamiento en la Laguna de Fúquene. Según el ente ambiental, las lluvias registradas en las últimas semanas en el norte de Cundinamarca, han generado el encharcamiento de los predios cercanos a los municipios de Fúquene, Guachetá, Susa y Simijaca, mientras la Laguna de Fúquene mantiene los niveles normales, sin registro de desbordamiento.
Según el informe de reportes hidrometereológicos de la CAR, en las últimas horas el nivel del Laguna de Fúquene subió en dos centímetros de la cota máxima de 2.539 msnm.
En un recorrido realizado por la zona cercana al afluente, se evidenció filtraciones de agua en algunos terrenos que han anegado predios, especialmente en la vereda Vuelta grande.
En la actualidad el equipo técnico de la Corporación realiza un recorrido para verificar los puntos críticos de inundación sobre el complejo lagunar Fúquene, Cucunubá y Palacio con el propósito de establecer posibles afectaciones en la región.
Los predios ubicados cerca al ecosistema son terrenos bajos, con condiciones lacustres, los cuales en décadas anteriores hicieron parte de las 12 mil hectáreas del complejo lagunar, susceptibles a inundaciones y encharcamiento.
«Esos predios son bajos porque eran terrenos propios de la laguna, si aumentan las precipitaciones, estos terrenos van a recibir toda el agua por escorrentía de las montañas contiguas y por la misma lluvia, el agua se apoza en estos lugares porque se encuentran n un nivel inferior que la misma vía principal, no se están llenando por ningún desbordamiento, como han asegurado algunos medios de comunicación, simplemente es una situación normal producto las mismas precipitaciones», manifestó Manuel González Director Operativo y de Infraestructura de la CAR.
La CAR junto a su equipo técnico, humano y empleando la maquinaría disponible continuará trabajando constantemente en la limpieza de cauces y la recuperación ambiental integral de los cuerpos de agua evitando así afectaciones a las comunidades adyacentes en estos ecosistemas.
“Se recomienda a las comunidades asentadas en las inmediaciones de cualquier tipo de fuente hídrica estar muy alerta a los cambios que se pueden presentar como consecuencia del incremento en las lluvias, recordarles que las autoridades están prestas a colaborar y atender cualquier situación adversa de manera oportuna”, agregó Néstor Franco González, director general de la autoridad ambiental.
Y agregó que “es importante reafirmar el mensaje de no ‘correr la cerca’ en temporadas de bajas precipitaciones, que es lo que ha venido sucediendo con la laguna de Fúquene, le han ido ganando espacio al espejo de agua y en temporadas de mayores lluvias hablan de desbordamientos que no existen”, puntualizó Franco González.
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