En un fatídico incidente ocurrido en los imponentes Farallones de Sutatausa, Cundinamarca, un joven de 26 años perdió la vida tras caer desde una altura aproximada de 40 metros en medio de actividades de equilibrio sobre cuerda. El lamentable hecho ocurrió en la tarde del sábado, 9 de diciembre.
La víctima fatal fue identificada como Bryan Clavijo, oriundo de Medellín, quien se encontraba instalando una cuerda floja en el momento del trágico suceso. Según informes preliminares, el joven perdió el equilibrio al soltarse la cuerda de seguridad, precipitándose al vacío desde la elevada altura.
LA VILLA conoció que Bryan Clavijo era un tatuador y pintor apasionado por la aventura que desde hace varios años practicaba equilibrio en highline.
El accidente tuvo lugar durante la práctica de esta actividad que goza de popularidad entre los amantes de la aventura y la adrenalina, quienes buscan desafiar sus límites y probar su destreza física. Sin embargo, este lamentable incidente resalta los riesgos asociados con estas actividades extremas.
Autoridades locales, en conjunto con los cuerpos de emergencia, se desplazaron hasta la zona para llevar a cabo el levantamiento del cuerpo del joven y recabar información adicional sobre las circunstancias que llevaron a este trágico desenlace.

La noticia ha conmocionado a la comunidad local y ha suscitado un debate sobre la seguridad en este tipo de actividades recreativas, así como la necesidad de establecer medidas preventivas más rigurosas.
Tras conocida la lamentable noticia, operadores turísticos de la zona lamentaron lo sucedido y llamaron la atención sobre las circunstancias de la tragedia. “Cuando las empresas operadoras prestamos servicios turísticos estamos obligados a operar bajo la normatividad vigente, contar con planes de contingencia, guías certificados y sobre todo velar por la seguridad de nuestros clientes; es otra la situación cuando este tipo de actividades se realizan por cuenta propia y bajo la responsabilidad de quién los practica, en ese sentido no se puede establecer una relación entre un cliente y un operador, todo debe ser materia de investigación”, indicó Guillermo Bernal, operador turístico de Sutatausa.
Amigos y conocidos de la víctima fatal han expresado sus condolencias a la familia del joven. Este lamentable suceso pone de manifiesto la importancia de practicar actividades recreativas extremas con la debida precaución y bajo supervisión profesional.
Vecinos de la zona hacen un llamado para que este incidente sirva como un “recordatorio de la necesidad de conciencia y responsabilidad al participar en este tipo de actividades, incluso en entornos naturales impresionantes como los Farallones de Sutatausa”.
Paz en la tumba para Bryan.