Así va la recuperación de la Laguna de Fúquene

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En las últimas semanas se ha logrado extraer 70.000 metros cúbicos de sedimentos. Fotos: Prensa CAR.

La decisión de las gobernaciones de Boyacá y Cundinamarca de unirse al proceso de recuperación de la laguna de Fúquene permitió el fortalecimiento del proyecto que busca el restablecimiento del entorno que hace parte del complejo lagunar que posee una extensión de 3.138 hectáreas y donde actualmente se adelantan intervenciones con maquinaria especializada para la remoción de sedimentos que logren mejorar las condiciones hidráulicas, de almacenamiento y la regulación hídrica.

El banco de maquinaria que opera en la laguna ha extraído entre el 2015 Y el 2018, dos millones 829 mil metros cúbicos de sedimentos.

En este momento en la laguna de Fúquene, ubicada en el altiplano cundiboyasence, están operando 19 equipos, que hacen parte del banco de maquinaría de la CAR Cundinamarca, entre ellas volquetas, cargadores, excavadoras sobre oruga y anfibias, barcazas, cosechadoras, dos Water Master y la Xieguazinsa – Ellicott: una draga de corte y succión de fabricación estadounidense única en el país en el trabajo de recuperación de humedales que extrae el material vegetal, lodos y sedimentos presentes en el cuerpo de agua.

La remoción de sedimentos

Camilo Zambrano, Director Operativo de Gestión del Ordenamiento Ambiental y Territorial de la CAR Cundinamarca, señaló que actualmente se han dispuesto tres estructuras de sedimentación, piscinas, construidas de manera artificial alrededor de la laguna de Fúquene.

“En primer lugar se deberá entender que las estructuras de sedimentación, permiten que los sólidos de menor tamaño, junto con los sedimentos extraídos del lecho de la laguna de Fúquene, se depositen en zonas delimitadas y conformen un sustrato que permita elevar el nivel de los terrenos respecto a la cota promedio de la lámina de agua de la laguna y disminuya los niveles de vulnerabilidad de estos terrenos, frente a los eventos de creciente que ocurren en las épocas de lluvia”, indicó Zambrano Contreras.

Durante el proceso de formulación de la primera fase del proyecto, para los años 2019 – 2020, se planteó la construcción de aproximadamente 40 estructuras de sedimentación, en los municipios de Fúquene, Guachetá y Ráquira. Estas piscinas tendrán la capacidad de almacenar aproximadamente 50 mil metros cada una, con dimensiones de 200 x 100 metros x 2.5 metros de altura.

El secado de los sólidos extraídos del lecho lagunar, tienen un tiempo estimado de secado de tres meses, durante este periodo el material dragado y sedimentado se deshidrata, y posteriormente es usado para elevar el nivel de los terrenos que se encuentran por debajo de la lámina de agua de la laguna, permitiendo disminuir los niveles de vulnerabilidad de estos terrenos, frente a los eventos de creciente que ocurren en las épocas de lluvia, otra parte de los sedimentos deshidratados son usados para labores en siembra de cultivos y pastos.

El río Suárez nace en la laguna de Fúquene y provee de servicios ecosistémicos a 11 municipios en Cundinamarca, 22 en Boyacá y 36 de Santander, que integran las cuencas alta, media y baja.

Con la operación del banco de maquinaria de la CAR en las últimas semanas se ha logrado extraer 70.000 metros cúbicos de sedimentos, de forma mensual, situación que permite que esta tenga más capacidad hidráulica y al mismo tiempo, pueda almacenar más agua.

Inversión de las gobernaciones

Las inversiones proyectadas con recursos provenientes del Sistema General de Regalías (SGR), como aportes de las gobernaciones se han planteado la ejecución de varias acciones tenientes aunar esfuerzos interinstitucionales en la recuperación de la laguna de Fúquene.

Es por este motivo, que la destinación presupuestal de los gobiernos departamentales serán destinados a la adquisición de 9 excavadoras anfibias, acciones de recuperación ambiental en la vereda Tarabita del municipio de Fúquene para la extracción de la vegetación acuática y sedimentos y la valorización de material vegetal extraído, mediante técnicas de compostaje, en Cundinamarca; y la recuperación ambiental en la vereda Quicagota y San Cayetano del municipio de Ráquira, para la extracción de la vegetación acuática y sedimentos.

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