El camino es la inversión social. Este es el lema del aspirante a la Alcaldía Municipal de Ubaté, Roberto Martínez Naranjo, quien a sus 58 años de edad quiere llegar al primer cargo municipal. Es Abogado de la Universidad Libre, con especializaciones en Alta Gerencia y Gerencia Pública.
Entre otras funciones, se ha desempeñado como Concejal, Personero y dirigente de entidades públicas y privadas.
El candidato de las Autoridades Indígenas de Colombia (AICO) habló con el periódico La Villa para exponer a los lectores parte de su programa de gobierno.
¿Según usted, cuál es el problema que afecta a Ubaté y cómo lo solucionaría?
Hay muchos problemas en Ubaté. Hay mucha pobreza en Ubaté, el descuido del municipio. No se ha podido ayudar a la gente humilde. Por ejemplo, en los Barrios Unidos del sur hay muchos niños realmente descuidados en la parte de nutrición, en protección. ¿Entonces qué voy a hacer yo? Voy a comenzar a revisar la salud de esos niños, de la integración familiar, disminuir la violencia intrafamiliar, para que en ese hogar se crie un niño verdaderamente formado. Los niños son la vida y el bienestar de un municipio, porque si ese niño está protegido hay un futuro próspero para la sociedad.
¿De ser electo alcalde cuál será su primera acción de gobierno?
Lo primero que voy a hacer es transformar la administración. Vamos a mirar cómo está conformada la parte administrativa, porque si el municipio no tiene una buena organización administrativa es muy difícil empezar mi administración. Revisar la parte de tránsito, de los vendedores ambulantes, las deudas del municipio, los comerciantes, y con todo esto necesitamos es que Ubaté renazca, barrer lo que está malo y continuar con lo que está bueno, con base en mi programa de gobierno que es el mejor de todos los tiempos, que es la educación. Si hay educación hay empleo, si hay seguridad hay empleo, si hay salud hay seguridad, entonces lo que hay que hacer es renovar.
¿En su Gobierno devolvería la Calleja en las ferias y fiestas de agosto?
A ver. En las reuniones que he venido realizando por los diferentes sectores he hecho la siguiente pregunta: ¿Ustedes qué opinan de la calleja? Unos dicen que es muy buena porque trae el turismo, porque la gente tiene una diversión gratuita, porque si hay turismo hay mucho comercio. Por otro lado unos dicen que no por el maltrato animal, que los niños y los borrachos se entran, entonces qué voy a hacer yo para que tengamos una concertación, vamos a realizar una encuesta para saber la voluntad de la gente de Ubaté y de ahí, con base en el resultado, tomaremos la decisión. Mi mandato será de concertación.
Pero si la decisión dependiera directamente de usted, ¿Qué haría?
Yo si la haría, bien organizada, la haría. A mí me encanta. Pero como no es sólo Roberto Martínez el habitante de Ubaté. Pero yo si la volvería hacer.
¿Cuáles son las fuentes de financiación de su campaña?
Muy fácil. Cuando yo me inicio hacer mi campaña yo sé que es eso. Llevo muchos años, con mi hermano Jorge Martínez Naranjo haciendo campañas políticas. Entonces la plata invertida es de mi bolsillo y con mi esposa hemos dado plata. Nadie me ha financiado un peso, por eso soy un candidato totalmente independiente y por eso nadie me puede reclamar o cobrar favores.
En la actualidad, el horario de rumba en Ubaté va hasta la media noche, ¿Usted ampliaría o dejaría igual?
Eso para decir ahorita es muy complicado, porque no conozco bien el sistema implementado. Pero por lógica hay que concertar con todos los expedidores de licor y evaluar la situación, porque es que aquí en Ubaté el problema es la falta de organización. A mí se me hace que el horario para una buena rumba, considerando que aquí no tenemos una ‘Zona Rosa’ a donde pueda ir la juventud, sería a la 1, 2 o 3 de la mañana, según el caso. Nos toca probar y dependiendo del comportamiento se tomará la decisión. En Bogotá, por ejemplo, ha resultado que entre más tarde la rumba, menos riñas se presentan, porque no se presiona a la gente, si hay alguien con sus traguitos pues se va, porque cuando salen todos a la vez comienza el desorden.
En su Plan de Gobierno afirma llevar medico personalizado a cada casa, ¿No le parece un poco utópica la propuesta?
De pronto usted no me ha escuchado, por eso me hace esa pregunta, y así como usted hay mucha gente equivocada. A ver le explico. Vamos a llevar por zonas a un médico, una ambulancia y una enfermera. Con base en el Censo programaremos un cronograma diario para atender a las personas en cada sector. Por ejemplo, el día lunes, a las 8 am se atiende a la familia López; a las 10, a la familia Chávez; a las 12, a la familia Durán, y así sucesivamente, en un día atenderemos a seis hogares. Con dos ambulancias serías 12 familias, en el mes serían cerca de 400 familias en un solo mes. Va a hacer mensualmente por sectores.
¿Cómo financiar ese sistema de médico en la casa que usted propone?
Mire, la ambulancia la tiene el municipio con el conductor, la promotora de salud, actualmente está en la nómina del municipio. Qué nos falta pagar, el médico general, que son 4 millones y la enfermera, que son 2 millones, serían 6 millones. ¿Cuánto nos vale eso en el año? 72 millones, más las prestaciones sociales y otras cosas, son 90 millones, ¿Sabe Cuánta plata tiene la Secretaría de Salud de Ubaté? Tiene 1.660 millones aproximadamente, ¿Será posible que no podamos pagar 200 millones para dos ambulancia?, ¿Será utópico eso?, ¿Será utópico que con dos ambulancias vamos a tender más de 300 personas al mes? Vamos a contratar al Hospital para que se encargue de este trabajo, ¿Con qué plata? Con la del municipio.
Jorge Suárez
REDACCIÓN LA VILLA