En un informe presentado por el Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD) indicó que desde 1934 la Laguna de Fúquene perdió 15 mil hectáreas por el cambio del uso del suelo para ganadería y minería.
A su vez indicaron que la Laguna de Fúquene paso de tener 18 mil hectáreas a contar hoy con 3 mil. «La Laguna se ha reducido en un 83 por ciento con relación a su tamaño original, esto porque se hizo un cambio de uso del suelo en la zona. Hoy día ese 83 por ciento de lo que era espejo de agua es ganadería«, sentencia el informe.
Asesores ambientales del organismo internacional indicaron que las especies invasoras también han contribuido en la pérdida de hectáreas en la laguna. «En el caso de la Laguna de Fúquene es evidente que el espejo de agua está hoy supremamente reducido porque hay varias especies invasoras dominando. Si se ve hoy la laguna, buena parte de la zona inundada está cubierta de verde y no tiene espejo de agua por la expansión de especies invasoras«.
Hoy, la comunidad que sabe algo de la cuenca de Fúquene reconoce que el lío ambiental existente es peligroso para toda la región, pero evade el asunto porque del aprovechamiento de estas tierras ha conseguido un éxito económico sin precedentes. Y no está dispuesta a perderlo. (Tambien le puede interesar: A Fúquene le hace falta Fu)
Un ejemplo de tal falta de consciencia, educación, seguimiento y evaluación de parte de las poblaciones y del Estado es que diez poblaciones cercanas a la región, con sus industrias lácteas a bordo, conducen por los desagües mal planeados y construidos todas sus aguas residuales hasta las inmediaciones del terreno.
Según el PNUD, si el hombre no para su intervención, pronto, la Laguna de Fuquene, será un triste recuerdo.
REDACCIÓN LA VILLA